domingo, 26 de enero de 2020

Alemania se abre paso hacia la recuperación: la industria oara la caída y servicios sigue tirando de la demanda


La tregua comercial y la extinción de los temores del Brexit han proporcionado a Alemania esperanzas en cuanto a su crecimiento que es necesario que mejore después de un 2019 al borde de la recesión.
Se prevé una recuperación económica del país gracias en parte a la subida del PMI compuesto que mide la actividad del sector privado la cual subirá en Enero y se colocará en sus máximos a mediados de año. Este aumento está siendo fomentado también por la recuperación de la confianza en las empresas alemanas que han recuperado los pedidos exteriores.



No solo ha sido el sector privado ya que este se ha visto fuertemente apoyado por el impulso que ha vivido el sector de servicios que ha registrado en Diciembre uno de sus puntos más altos. Este aumento y la estabilidad del PMI industrial han permitido a Alemania alejarse del peligro de que el PIB sufra otro inconveniente como el ocurrido el año anterior.

Esta estabilización del PMI industrial así como el crecimiento general de la economía alemana han permitido  que los encargos en este sector industrial consigan crecer después de 7 meses, el crecimiento de estos pedidos esta provocando un aumento del empleo, todo esto se ve ligado con la importante recuperación de la confianza en las empresas alemanas en el sector industrial.

A pesar de este crecimiento en el comercio existía el temor de que empresas alemanas expuestas a la demanda interna se vieran afectada por la crisis industrial que viven las fábricas alemanas, se temía retornar a la situación de declive alcanzada tras la incertidumbre del Brexit. El PMI manufacturero ha empezado el año aumentando pero sigue por debajo del nivel adecuado.

Las fábricas alemanas a pesar de continuar en esta crisis que sufre su sector es destacable que su ritmo de recesión ha disminuido gracias a estos nuevos pedidos que registraron el primer crecimiento en 7 meses de constantes descensos. Este hundimiento sufrido por las fábricas alemanas terminó lastrando a todo el sector europeo perjudicando a su expansión económica.

A pesar de todo lo que se considera como fundamental para este crecimiento es la recuperación en la confianza empresarial y la confianza del sector privado de que las peores consecuencias de la recesión sufrida en 2019 ya han sido superadas.

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